A la tagua, también se le conoce como nuez de marfil o marfil vegetal, y aunque tienen propiedades completamente distintas, tienen similitud con el marfil de los colmillos (o realmente in
cisivos) de los elefantes; pero como todos sabemos, los elefantes se encuentran en protección y la cacería de elefantes y tráfico de marfil de elefante es ilegal, así que mejor usar el marfil vegetal ;)
El producto tuvo mucha demanda en los países del hemisferio norte hasta inicios de este siglo principalmente para producción de botones. Se estima que, en 1920, un 20% de los botones producidos en los Estados Unidos eran hechos de tagua, procedentes principalmente de Ecuador, Colombia y Panamá. La industria ha tenido un gran retroceso después de la segunda guerra mundial, cuando el plástico remplazó casi totalmente el uso de la tagua. Ahora es un material muy importante en la realización de productos artesanales.
Esta palma crece en los bosques húmedos de la región pacífica. Hay de diferentes formas y tamaños.
El proceso para generar las semillas tal cual las conocemos es más o menos el siguiente:
1. Se recogen las semillas de las palmeras
2. Se mantiene
en un proceso de secado por un período aproximado de tres meses
3. Se le remueve toda la cáscara que protege la semilla, ya endurecida apropiadamente
4. Algunas taguas son cortadas para generar piezas con formas específicas
5. Se lava cada pieza y se pone a secar por un período de dos a tres semanas
6. Las semillas son puestas en una tintura a punto de ebullición por dos días para que tomen su color seleccionado
7. Las piezas quedan listas para su uso
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